A cambio de este acuerdo, el Gobierno ya comenzó a liberar SIRAs para poder importar autos.
Después de varios días de negociación, el Gobierno alcanzó un acuerdo con las automotrices para congelar los precios de algunos modelos de 0km por 60 días. El convenio está siendo firmado en estas horas por las terminales. Habrá un modelo como mínimo por marca y de origen nacional o importado. El resto de los vehículos tendrá el ajuste que disponga cada marca.
A cambio de este acuerdo, el Gobierno ya comenzó, desde esta tarde, a liberar SIRAs para poder importar autos. Desde hacía más de dos meses que no se otorgaban estos permisos para importar y el mercado estaba agravando su desabastecimiento.
La firma de esta convenio permite también destrabar el problema que existía con la entrada en vigencia de los cambios al impuesto al “lujo”, que tendría que haber comenzado a regir el viernes pasado. Entre los modelos que se sumen a este programa de “Precios Justos” habrá versiones de las pickups, como Frontier S 4×2 manual y Ranger XLS single turbo manual 4×2, Toyota Yaris XLS, Fiat Cronos Like, Chevrolet Montana, Renault Alaskan Emotion y los utilitarios Berlingo y Partner, y el Volkswagen Polo Track 1° Edition.
La negociación que llevó el Gobierno con las automotrices para acordar un tope en el aumento de los 0km comenzó la semana pasada, tal como adelantó Ámbito el viernes pasado. A cambio, se acordó comenzar a liberar permisos para importar como también que entre en vigencia la actualización de la base tributaria sobre la que se calcula el impuesto al “lujo”.
Por estos dos motivos, desde el inicio de septiembre no había lista de precios oficiales vigentes y en las concesionarias estaban operando con ajustes estimados. Algunas terminales enviaron a su red, el viernes pasado, las nuevas listas, creyendo que entraría en vigencia la suba de la base del impuesto al “lujo”, pero al no aparecer la resolución, tuvieron que dar marcha atrás.
En la práctica, el único segmento que tiene precios vigentes es el de la pickups, que no pagan Impuesto Interno. En este caso, los aumentos de las distintas marcas fueron de entre 12% y 15%. En el caso de los modelos importados o los nacionales que pagan o estaban por pagar ese tributo, los vendedores se manejaron con subas de alrededor de 7%, para los casos de marcas que en agosto habían hecho dos incrementos en el mes, como consecuencia de la devaluación post PASO, o de alrededor de 15%, para las que mantuvieron los mismos valores durante todo el mes.
Lo concreto es que, en el mercado, se operó con precios “estimados”. La actualización de la base imponible del Impuesto Interno que tenía que regir desde comienzos de septiembre. Ese ajuste, en base al índice de precios mayoristas del sector, se aplica de forma trimestral y, en este caso, era de 24%. De esta manera, para el precio al público, lo empezarán a pagar los modelos de más de $10.500.000. Hasta el jueves lo pagaban los 0km de alrededor de $8.400.000.
Por este motivo, hay numerosos modelos que están “topeados” bajo ese precio para no pagar el impuesto interno. La suba de la base imponible es clave ya que permitirá ajustar los precios y acomodar los valor de los 0km que hoy están distorsionados para no tributar.
Fuente: Ámbito