Después de lo que significó la muerte del playero en Rosario, los trabajadores llevan adelante este lunes medidas de fuerza en protesta contra la inseguridad y la violencia del narcotráfico. En la jornada no habrá clases, como así tampoco servicio de transporte de colectivos y taxis. También se suman protestas con la suspensión de abastecimiento de combustible en estaciones de servicio y la recolección de residuos por la mañana de hoy.
A la espera de la puesta en funciones del comité de crisis que convocó el presidente Javier Milei y los ministros Patricia Bullrich (Seguridad) y Luis Petri (Defensa) a pedido del gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, los ciudadanos de Rosario sigue con las protestas en reclamo de un freno a la violencia en las calles de esa ciudad.
La ola de asesinatos que generó la acción inmediata del Gobierno, arrancó con la muerte de los taxistas Héctor Raúl Figueroa (de 43 años), y Diego Alejando Celentano (de 33). A ellos se sumaron en las últimas horas el chofer de la línea K Marcos Daloia (de 39 años) que falleció este domingo, y el empleado de una estación de servicio Bruno Bussanich, de 25 años.
Docentes de escuelas públicas de Rosario dispusieron un paro para hoy, como respuesta a la ola de violencia en la ciudad, con el asesinato de cuatro trabajadores en menos de una semana.
El gremio Amsafé Rosario emitió un comunicado este domingo por la tarde donde anunció un “cese total de actividades sin asistencia a las escuelas para este lunes 11”, ante “la escalada de violencia criminal”.
Rosario continuará sin colectivos este lunes, luego de confirmarse la muerte del chofer baleado el jueves último. A la medida se suman los taxis.
La suspensión de los servicios urbano e interurbano continuarán hoy, por quinto día consecutivo, según estableció la UTA Rosario a través de un mensaje difundido desde su cuenta oficial de X (ex Twitter), como reacción tras el ataque al conductor de la línea K, que falleció este domingo al mediodía en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez.
AMBITO